Científicamente hablando

La piedra de sol o heliolita es una variedad de oligoclasa, mineral de la clase de los silicatos, subclase de los tectosilicatos, familia de los feldespatos. Su composición química es (Na, Ca)(Al, Si)4O8.

Es una piedra de color naranja-marrón que contiene pequeños cristales de hematita sobre los cuales se refleja la luz y que le dan un brillo particular.

Tradicionalmente hablando

La piedra de sol fascinó a los pueblos a través de todas las épocas.

Se le reconocen numerosas propiedades ligadas a su color naranja, luminoso y solar. En la antigüedad, este cuarzo naranja con reflejos brillantes hacía creer que tenía virtudes mágicas, como por ejemplo, en Escandinavia, donde los vikingos la veneraban. En la mitología nórdica, tener esta piedra permitía un acceso más fácil al Valhalla, el lugar donde los guerreros valientes eran llevados una vez muertos para disfrutar de la merecida paz.

También se dice que la piedra de sol podía utilizarse como brújula en los navíos para orientarse en el mar. Era suficiente poner una heliolita ante los ojos, mirando al cielo, para encontrar la posición del sol.

En la Grecia antigua, la piedra de sol representaba al dios del sol, Helios, y confería buena suerte, longevidad y prosperidad a todos los que poseían una.

En todos los pueblos, en todas las creencias, esta piedra era símbolo de potencia y armonía.

Algunas tradiciones interesantes:

Astrología: la piedra de sol representa a la autoridad, el calor y el sexo masculino.

Budismo: el hombre de oro, la piedra de Vishnu

Celtismo: luz cósmica

China: sol imperial

Cristianismo: representa a los 12 apóstoles

Grecia: el padre, la inteligencia cósmica

Hebreos: es la piedra del Gran Sacerdote

Energéticamente hablando

Por su color solar, es considerada como piedra que confiere sentimientos luminosos, pensamientos positivos. Es de gran ayuda para dar caza a las ideas pesimistas, los sentimientos tristes, la tristeza, el replegamientos sobre uno mismo.

Es una piedra de optimismo que nos hace dar un sí a la vida, que nos hace ser realistas sobre nuestra propia fuerza y nos hace ser conscientes de ella.

Crea una abertura al mundo, a los demás: con más empatía, simpatía y generosidad.

En ningún caso la información y el asesoramiento que propone MINERAL SWEET serán susceptibles de substituir una consulta o un diagnóstico formulado por un médico o un profesional de la salud.